Si los mensajes en Facebook les parecen ofensivos y profanos, puedes considerar hacerse un perfil en una megapulcra red social dirigida para cristianos temerosos de Dios.

Faceglória prohíbe más de 600 palabras, cualquier contenido que consideren erótico o violento y referencias a la homosexualidad.

Los usuarios del sitio hacen clic en “Amén”, en lugar de “Me gusta” para mostrar su agradecimiento a los mensajes “libres de pecado”. El sitio creado en Brasil, que tiene 150 mil miembros desde su lanzamiento el mes pasado, tiene a la comunidad cristiana evangélica del país como su público objetivo.

Publimetro habló con el cofundador del sitio, Acir Fillo, y con la diseñadora web, Atilla Barros, de la ciudad de Ferraz de Vasconcelos en Brasil, sobre la gracia de la inmaculada red social.

¿Qué hace tan divino a Faceglória?

–Nos estábamos dando cuenta de que Facebook últimamente estaba mostrando mucha pornografía y violencia y ese tipo de cosas no complacen a la familia cristiana. Por lo tanto, decidimos crear un sitio sin groserías, un sitio donde se respeten nuestros principios como cristianos evangélicos y donde podamos hablar de Dios y otros temas importantes.

Y por lo tanto, para difundir el mensaje del cristianismo.

–Sí. Queremos ser una herramienta para promover la paz en el mundo, para crear conciencia para los jóvenes. Mientras que el Estado Islámico utiliza Facebook para reclutar a los jóvenes, queremos trabajar por la paz; queremos ser diferentes. Nuestro plan es hacer alianzas y lanzar campañas con temas muy importantes, como la política y el aborto, por ejemplo. Nuestro enfoque en la creación del sitio no es simplemente de carácter económico.

Faceglória está dirigido a los cristianos. Los críticos van a decir entonces que no es para la gente de todos los credos.

–Nosotros somos evangélicos, pero todo el mundo es bienvenido a formar parte de Faceglória. Sólo le pedimos a la gente a respetar nuestras reglas y a los miembros del sitio.

¿Cuáles son las reglas y quién las hace?

–Los propios miembros deciden lo que está mal o no. Si ven algo que no les parece bien, pueden reportarlo a nosotros y un equipo especial analizará el caso. Pero tienen la libertad de decir si ellos no están de acuerdo con algo, no hay problema con eso.

Sin embargo, su sitio prohíbe contenido que haga referencia a la homosexualidad.

–Pueden participar en nuestro grupo porque no tenemos ningún tipo de prejuicio, eso es seguro. Lo único que decimos es que ellos deben respetar nuestras normas cristianas y no publicar material que pueda desagradar a los amigos y miembros.

Por ahora, Faceglória sólo está disponible en Brasil y en portugués. ¿Hay interés por expandirse al extranjero?

–¡Claro! Ya hemos registrado la dirección URL faceglory.com y en una semana estaremos lanzando el sitio en inglés. Más versiones con otros idiomas tal vez salgan en los próximos meses. Nuestro sitio web todavía no está completo, pero estamos trabajando duro para llegar pronto a un millón de miembros y en un par de años hasta 20 millones en Brasil y 10 millones en todo el mundo. También se está desarrollando una aplicación móvil. Tenemos un montón de amigos y empresarios que nos están ayudando porque creen en nuestro proyecto.

Dios perdona todo lo que hemos hecho, pero al parecer Mark Zuckerberg no, ya que Facebook los ha acusado de plagiar su sitio.

–Recibimos una notificación extrajudicial de parte de ellos, pero no estamos preocupados porque hemos sido dueños de la marca Faceglória desde el inicio de la idea. En realidad, ellos comenzaron un caso en contra de nosotros hace tres años, pero perdieron. Ellos no son dueños del nombre “Face”, por lo que tenemos el derecho a usarlo también.

¿Así que no se sienten amenazados por el gigante de las redes sociales?

–Por supuesto que no. Ellos están diciendo que les copiamos, cuando ellos imitaron a Orkut [red social original de Google]. El modelo de red social es universal, todos son similares. Pero puedo decir que no queremos iniciar una guerra con ellos. De hecho, estamos en busca de una buena relación con ellos. Nuestro propósito es convivir en paz.

(Wanise Martínez, Publímetro)