Streaming: un servicio que se reinventa

Streaming: un servicio que se reinventa

El consumo de contenido bajo demanda y sobre banda ancha revolucionó la industria del entretenimiento. Con la llegada de una nueva generación de players, el negocio vuelve a reorientarse. Las claves para ganar y por qué las telefónicas juegan a dos líneas.

La tecnología de streaming (transmisión de audio y video en tiempo real, por Internet) quemó etapas en los últimos dos años. Y de una simple promesa pasó a convertirse en una contundente realidad, con capacidad de transformar industrias tan poderosas como las del cine, la televisión, la música, los medios de comunicación y hasta el mundo editorial o el teatro. La clave de esta revolución tecnológica y de negocios está en tres fenómenos que se sucedieron en simultáneo. Por un lado, la explosión de la banda ancha, que ahora es realmente ancha y por allí pueden circular todo tipo de contenido sin inconvenientes. Por otro lado, una transformación radical en la forma en que el público consume ese contenido, a cualquier hora, en cualquier lugar y en todo tipo dispositivo. Y, además, el desarrollo de modelos de negocio exitosos que lograron vincular a los productores de contenidos con el nuevo público de una manera simple y beneficiosa para ambas puntas de la cadena de distribución. Netflix, el líder en series y películas online, es apenas la punta del iceberg de un fenómeno que recién está dando sus primeros pasos.
En la Argentina, son más de 550.000 los hogares que ya pagan para ver videos bajo la modalidad del streaming, de acuerdo al último informe de la consultora especializada Dataxis. A un promedio de entre dos y tres usuarios por cuenta, se puede estimar que son más de 1,3 millón los argentinos que ya “miran televisión” cuándo y dónde ellos y ellas quieren, y en el dispositivo que más les gusta. Para comparar: la cifra equivale a unos 13 puntos de rating, apenas por debajo de los dos programas más vistos en estos momentos: ‘Las mil y una noches’ (unos 20 puntos) y’Esperanza mía’ (más de 15).
El crecimiento de los servicios de video online en la Argentina parece imparable. En 2012, pagaban por ellos 186.000 usuarios; en 2013, ya eran 323.000; y, en 2014, las suscripciones sumaron 556.000. Tal crecimiento se vio reflejado en el incremento del consumo de la banda ancha, a un ritmo del 30% anual, según los últimos datos del proveedor de Internet Fibertel. “El 50% de este tráfico ya son videos: de Netflix y YouTube principalmente”, le dice a IT Business Gonzalo Hita, gerente Comercial de Cablevision y Fibertel.
Por su parte, el estudio de Dataxis muestra que el 45,2% de los usuarios argentinos de streaming prefieren a Netflix, le sigue Arnet Play, del Grupo Telecom (con el 34%), y On Video, de Telefónica, con el 17%.
Las empresas de televisión paga (por cable o satélite) también ofrecen televisión a la carta. Cablevisión, del Grupo Clarín, por dos vías: por un lado, saca provecho de la tecnología bidireccional del cable con su servicio Cablevisión On Demand (que no pasa por Internet). Pero también tiene un servicio online: Cablevisión Play, que suma los servicios en streaming de las diversas señales que forman parte de la grilla. La compañía informa que ya tiene 215.000 clientes usando On Demand, más 50.000 de Play.
DirecTV, por su parte, ofrece DirectTV Play, de similares características a Cablevisión Play. “El objetivo es darles a nuestros clientes la posibilidad de encontrar en un solo sitio todo el contenido online que ya venían ofreciendo canales como HBO, FOX o ESPN por separado. Además, agregamos contenido propio y original”, explica Juan Gujis, gerente de Marketing Online de DirecTV, a IT Business.
Los operadores telefónicos que ofrecen banda ancha no se quedan afuera del mercado del streaming. Telefónica, con el producto On Video. Para suscribirse, no hace falta ser cliente de Speedy. Gustavo Castro, jefe de On Video, cuenta que para armar el contenido toman en cuenta el perfil del usuario argentino. Y que lo más alquilado en estas semanas fue Relatos Salvajes y Grandes Héroes.
El Grupo Telecom desarrolló dos servicios de streaming, que son exclusivos para sus clientes. Play Video, para los de Personal; y Arnet Play, para los de Arnet. Patricio Cassain, gerente de Estrategia, Innovación y Marketing cuenta que el 60% de los usuarios son hombres y un 30% jóvenes.

Los nuevos players

Sin embargo, más allá de los players conocidos, varios son los actores nuevos que empiezan a operar en el país y que IT Business reveló para esta nota. Se trata servicios pagos más chicos, temáticos, como Crunchy Roll (animé japonés, para el público infantil), y Viki y DramaFever (televisión coreana). “Esto recién empieza y va a seguir creciendo. Netflix se transformó en el gran competidor, al que todos tratarán de complementar con contenido específico, que ellos no pueden cubrir. Lo que más prometen son los contenidos infantiles y los deportivos”, dice Carlos Blanco, director de Análisis de Mercado de Dataxis.
Otro de los sectores que se reinventa con el streaming es el negocio de la música. La industria vive por estos días su tercera revolución digital. La primera sucedió a principios de siglo, con la masificación que llegó de la mano del servicio Napster (canciones sin derecho de autor); la segunda llegó con los reproductores de música en mp3 y, especialmente, el iPod.
En el nuevo mundo del streaming, hoy, el líder indiscutido es Spotify. La empresa sueca que llegó al país en septiembre de 2013 ofrece un servicio gratuito, con publicidad y otro pago, que permite descargar canciones. Ya tiene 60 millones de usuarios en todo el mundo, de los cuales 15 millones pagan. La gran fortaleza es la cantidad de canciones y que funciona en todas las plataformas con una tecnología de avanzada. La contra, para la Argentina: se paga con tarjeta de crédito.
También en este rubro, las telefónicas presentes en el país hacen más que acto de presencia, a traves de sus filiales para móviles: Claro desarrolló Claro Música, con un formato gratuito y otro pago. “Esta va a ser, sin dudas, la forma de escuchar música en los próximos años”, dice a IT Business Federico Pedersen, gerente de Valor Agregado de Claro Argentina. La firma adquirió hace un año la empresa brasileña Imúsica, que es la que desarrolló y mantiene su plataforma de música online.
El Grupo Telecom ofrece Personal Música, con distintas formas de contratación. “Tenemos un promedio de 850.000 descargas mensuales”, indica Cassain. En octubre, la compañía llegó a un acuerdo con Spotify por el cual ofrece a sus clientes tarifas promocionales.
Por su parte, el servicio de Telefónica se llama ‘Napster’, una suerte de homenaje a los inicios de la música digital. Para usarlo, hay que ser cliente de Speedy o Movistar. Tiene más de 34 millones de canciones, que se pueden escuchar desde cualquier dispositivo. Leonardo Rubino, jefe de Marketing de servicios y aplicaciones cuenta que, para la selección de contenido, usan una agencia internacional y que los artistas más escuchados actualmente son Abel Pintos, Sin Bandera y David Guetta. Sin embargo, también en este sector, cada vez hay más competidores, como Deezer, Google Play, Beats Music, Rhapsody, Guvera y Rdio.

Más contenidos

Para los amantes del teatro que no tienen suficiente tiempo para acercarse a las salas, el 27 de marzo se presentó en la Argentina Teatrix (www.teatrix.
com.ar), el primer servicio online de teatro a demanda. Creado por Mirta Romay -la hija de Alejandro Romay, exdueño de Canal 9- ofrece algunas de las propuestas más relevantes de la escena local como ‘La omisión de la Familia Coleman’ (de Claudio Tolcachir) o ‘El loco y la camisa’ (de Nelson Valente), que fueron grabadas especialmente para la experiencia digital. Las obras se pueden alquilar o comprar. Hay un precio por cada obra y una suscripción que ofrece un paquete de obras a mirar por mes.
Por otro lado, el streaming avanza en el mercado editorial, a medida que crece el hábito de leer libros digitales en e-readers y tabletas. En lugar de bajar y pagar por cada libro que se consume, lo que viene son modelos de suscripción, que ofrecen extensos catálogos accesibles por un abono mensual. El más potente es el que presentó Amazon a fines de 2014: Kindle Unlimited, que pone a disposición, en los Estados Unidos, más de 800.000 títulos para leer en cualquier dispositivo, por u$s 9,99 mensuales. En español se puede optar por Symbol 24 (www.24symbols
.com), con más de 200.000 títulos. El servicio tiene un precio de u$s 8,99 por mes.
Son estos, los nuevos rubros, que anticipan que el modelo del consumo bajo de demanda promete expandirse a otros sectores de la economía digital.

(Cronista.com, Ricardo Braginski)